La evolución del hombre con respecto a los recursos que tiene a su alrededor, se ve a lo largo de la historia y es que siempre se encuentra en búsqueda de mejorar y adaptar su entorno para su comodidad. Por ello, su capacidad inventiva no ha encontrado límites, lo que ha llevado a obtener los avances tecnológicos con los que hoy en día contamos. Sin embargo, existen dos momentos y descubrimientos puntuales, que aceleraron en gran medida la forma de vida de la sociedad y que marcaron un antes y un después en la historia de la humanidad.
¿Qué fue la Primera Revolución Industrial?
La primera revolución industrial se inició hacia finales del siglo XVII y consistió en la transformación del modo de vida de gran parte de la población Europea, que hasta ese momento tenía como sistema de producción la tracción animal y la agricultura dentro de una misma región. La primera revolución industrial produjo una gran transformación en todos los sectores de la sociedad, tal con el económico, laboral y social.
El factor que dio inicio a este gran cambio en la población de la época, fue el descubrimiento de la máquina de vapor, y es que a partir de ella surgieron múltiples usos que permitieron la evolución de la industria y los medios de transporte, por lo que se aumentó considerablemente el rango de alcance de los productores, lo que a su vez incrementó la producción.
Sin embargo, ésta revolución fue interrumpida debido a conflictos que se presentaron de forma simultánea que impidieron profundizar en los avances de la industria, tal como fueron la guerra, epidemias y hambruna. Por lo que fue hasta mediados del siglo XVIII, que resurgiría la activación de la industria pesada y la minería en gran parte del territorio europeo.
Las industrias aprovecharon los recursos naturales con los que contaban en su entorno para comercializarlo, es así como aparecieron las primeras industrias textiles, siderúrgicas, las empresas que trabajaban la madera y el carbón, gracias a la aparición de los barcos y ferrocarriles, se hizo posible el transporte de mercancía entre regiones, por lo que también se elaboraron vías de comunicación para transportar los productos. Igualmente, se incremento la producción de alimentos, por lo que surgieron nuevas técnicas de cultivo y se incorporó el uso de los fertilizantes.
Todo ello generó grandes avances en la industria pero además, trajo consigo el comienzo de las divisiones entre las clases sociales de forma muy marcada, y es que la monarquía disponía de los recursos, mientras que la burguesía era la dueña de la industria y el proletariado, que formaba la mayor parte de la población, era la clase trabajadora.
¿Qué fue la Segunda Revolución Industrial?
Para mediados del siglo XIX, los descubrimientos que dieron paso a la segunda revolución industrial fueron el motor de combustión interna, la electricidad y posteriormente el petróleo y el gas como fuentes de combustible. Adicional a ello, los avances en la ciencia y en la tecnología tuvieron mayor difusión en Europa y Estados Unidos, por lo que la capacidad inventiva del ser humano tuvo un gran auge y favoreció diversas áreas.
La minería rindió grandes frutos al encontrar muchos usos a minerales encontrados, como el níquel, acero, zinc, aluminio, cobre, entre muchos otros, que tuvieron gran influencia en el área de la química y de la construcción. En ésta última la formación del cemento contribuyo en gran medida con el crecimiento de las grandes ciudades, diseñando estructuras más estables y duraderas.
La segunda revolución industrial tuvo sus inicios en Europa, Estados Unidos y Japón, pero se extendió rápidamente por otras partes del mundo, quienes adoptaron las nuevas tecnologías a sus propias necesidades y continuaron con más avances, por lo que este fenómeno es considerado por muchos como la primera globalización.
Con respecto a los medios de transporte, se crearon los vehículos automotores y la aviación dio sus primeros pasos, además se mejoró las técnicas de los ya existentes como el barco y ferrocarril, para tener mayor capacidad de viaje y que más personas tuvieran acceso a ellos. Adicional a esto, la comunicación a través de la radio y el teléfono resultó un cambio que favoreció en gran medida el trabajo, los avances científicos e incluso el sistema educativo de la época.
De igual manera, las industrias cada vez más mecanizadas encontraron una forma de producción que acelerara el proceso para llegar a más personas en menos tiempo y abaratando los costos, que es lo referente a la producción en serie.
Diferencia entre la Primera y Segunda Revolución Industrial
- La primera revolución industrial se originó en Europa, principalmente en Inglaterra, mientras que la segunda tuvo su auge igualmente en gran parte del continente europeo, pero también en países como Estados Unidos y Japón.
- El comienzo de la primera revolución industrial estuvo marcado por el descubrimiento de la máquina a vapor, en cambio la segunda revolución industrial está relacionada con la aparición de otras fuentes de energía como el petróleo, el gas, el motor de combustión interna y la electricidad.
- Durante la primera revolución industrial se desarrollaron las primeras vías de comunicación terrestres para ferrocarriles; con la segunda, se perfeccionaron los medios de transporte ya existentes para tener mayor capacidad de viaje y se crearon nuevos que lo hicieran del uso común de la población.
- La capacidad inventiva del hombre tuvo su gran auge en la segunda revolución industrial, ya que se perfeccionaron técnicas que facilitaron y mejoraron en gran medida las tareas en diversas áreas. Mientras que en la primera revolución industrial, aunque si hubo ciertos inventos no generaron alto impacto pues la tecnología aún era muy rudimentaria y de limitado acceso.
- En la primera revolución la población trabajadora, es decir el proletariado, era masiva con poca organización. Por otra parte, en la segunda revolución la estructura de los empleados era más organizada y especializaba el obrero para realizar las tareas correspondientes.